Los rescatistas trabajaron incansablemente para mantener con vida a las ballenas y poder regresarlas al mar.
Una manada de 49 ballenas piloto de aleta larga fue encontrada varada en una playa remota en la Isla Sur de Nueva Zelanda el lunes, lo que llevó a los guardabosques a iniciar una misión para mantener a las ballenas vivas y devolverlas a aguas profundas. Con los guardabosques unidos a los residentes locales y un grupo de rescate de ballenas, un total de 200 personas trabajaron juntas para empapar a las ballenas con baldes de agua y asegurarse de que mantuvieran la presión fuera de sus aletas hasta que la marea subiera nuevamente.
Project Jonah
Nueve de las ballenas habían sido encontradas muertas a su llegada a Farewell Spit, pero los voluntarios lograron mantener con vida a todas las demás ballenas el lunes. Cuando la marea finalmente subió por la noche, los voluntarios formaron una cadena humana y guiaron a las ballenas de regreso a aguas más profundas donde los botes se movían de un lado a otro para evitar que las ballenas nadaran de regreso a la costa.
Si bien nos gustaría terminar la historia allí, la manada de ballenas se encontró varada una vez más el martes por la mañana, solo que esta vez había solo 28 ballenas vivas. Con las ballenas luciendo débiles y lánguidas, los voluntarios comenzaron a mecer a las ballenas e intentar dirigirlas hacia aguas más profundas. La formación de otra cadena humana ayudó a empujar a los animales más profundamente en el agua, y por la tarde, la manada había nadado con éxito mar adentro, para alivio de los voluntarios.
Anthony Phelps - Reuters
“Los voluntarios han salido del agua ahora porque las ballenas están nadando por debajo de la zona de marea baja y se dirigen hacia el mar”, dijo el guardabosques local del Departamento de Conservación, Andrew Lamason. “Eso es realmente una buena noticia; tan buenas noticias que me voy a casa”.
La Isla Sur de Nueva Zelanda no es ajena a las ballenas varadas. Parte de la razón por la que esto sucede se debe a la forma geográfica única de la región, que parece un anzuelo y hace que la señal de ecolocalización de una ballena se recupere. Esto desorienta a la ballena hacia aguas menos profundas e inseguras, creando una trampa natural.
Tracey Cooper
Hace cuatro años, más de 650 calderones se vararon en Farewell Spit en dos varamientos masivos separados. Más de 350 murieron y unos 300 se salvaron.
Las ballenas piloto son relativamente pequeñas, pero pueden crecer hasta más de 6 metros (20 pies).
Aunque no todas las ballenas piloto de aleta larga varadas se salvaron esta semana, aplaudimos los incansables esfuerzos de los voluntarios locales para rescatar a todas las ballenas que pudieron.
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