El koala con un inesperado espíritu navideño había encontrado la manera de entrar en la casa y se trepó al árbol de Navidad.
El inesperado hecho ocurrió el último miércoles en Adelaide, Australia, cuando la familia McCormick se sorprendió al encontrar un koala en su árbol de Navidad.
Horas antes, Taylah, la hija de 16 años, fue la última en abandonar la casa familiar alrededor de las 3 de la tarde. Antes se aseguró de que el perro estuviera afuera, cerró las puertas traseras y apagó todas las luces.
Cuando toda la familia regresó alrededor de las 6 de la tarde, algo fue extraño.
"Creo que el perro fue directamente al árbol de Navidad y olfateaba, mi mamá pensó que era un poco extraño", dijo Taylah.
“Había adornos por todo el suelo… y ella miró hacia arriba y había un koala en el árbol. Estaba bastante enredado con las luces. Era un árbol falso y muy viejo, pero aun así intentó comerse las hojas... La vi masticar algunas, pero se detuvo cuando se dio cuenta de que era plástico ".
La madre de Taylah, Amanda McCormick, dijo que se quedó totalmente sorprendida.
“Pensé '¿Es esto una broma?' Pensé que uno de mis hijos podría haber puesto un juguete de peluche allí, pero no, era uno vivo”, dijo.
Amanda llamó al centro de rescate de animales, quien inicialmente pensó que todo era una broma.
"Esta noche, nuestro operador de línea directa recibió una llamada. Al principio pensó que era víctima de una broma", escribió 1300 Koalaz en su página de Facebook.
"Pero no, un koala desesperado por entrar en el espíritu navideño entró en la casa de Amanda McCormick y decidió que quería ser el hada del árbol de Navidad".
Cuando llegaron los rescatistas, descubrieron que era una joven hembra de unos tres o cuatro años y que gozaba de buena salud.
El equipo de rescate soltó a Daphne (así decidieron llamarla) en una zona boscosa cercana, y los McCormick dicen que la estarán cuidando a partir de ahora.
"Fue una experiencia inolvidable. Después de un mal año, fue bueno tener esa experiencia", finalizó.
A pesar de los terribles incendios ocurridos a finales de 2019 e inicios de 2020 en Australia, los koalas, una especie en riesgo, siguen luchando por sobrevivir y la acción curiosa de Daphne nos devuelve la esperanza de que todo será mejor para ellos.
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