Solidaria Maestra salva la vida del Conserje de la escuela donándole un riñón

Cuando todo parecía perdido, el conserje de una escuela pudo salvarse gracias a la gran acción de una maestra.

 

El padre de la maestra Erin Durga, quien también fue maestro, una vez le dio un consejo: “hazte amiga de los conserjes de la escuela porque ellos son el corazón de la escuela”.

Esas palabras se convirtieron en parte de su vida laboral en la escuela. A través de los años como maestra de tercer grado, ella siempre se mostró amable con los demás, solidaria, tratando de dar el mejor ejemplo a sus alumnos.

El conserje de la escuela, Patrick Mertens, había estado enfermo y necesitaba un riñón para salvar su vida, pero empezó a perder la esperanza de encontrar un donante.

El hombre de 64 años, no se había atrevido a preguntarle a sus compañeros de trabajo en la escuela primaria Kimball en Minnesota (EE. UU.), mientras buscaba un donante. No quería incomodar a ninguno de los profesores de la escuela y pensó que ya habían hecho lo suficiente por él al organizar una recaudación de fondos para apoyar su diálisis.

Su hija, Kayla, desesperada, en enero publicó un pedido de donante en Facebook.

Erin vio la publicación y su corazón sintió la necesidad de ayudar así que le dijo a su esposo que planeaba donar un riñón.

"Aproximadamente 30 segundos después de leer esto, me dirijo a mi esposo y le dije: Pat necesita un riñón, debe ser sangre de tipo O y creo que voy a ser yo", dijo.

Ella tenía razón, tenían el mismo tipo sanguíneo y después de algunas pruebas se enteró de que era compatible.

¡Los Mertens no lo podían creer y estaban muy emocionados!

"Hubo lágrimas y abrazos, fue hermoso", dijo Erin.

Con la donante ya lista, Patrick recibió el trasplante de riñón en julio y la operación fue un éxito. Tanto él como Erin estaban lo suficientemente saludables como para volver a trabajar en agosto.

Gracias a la donación, Pat dijo que ahora ha recuperado su vida.

"No sé cómo podré agradecérselo", dijo.

"Me siento un poco avergonzada cada vez que dice eso", dijo Erin, y agregó que no donó su riñón por el elogio, sino por la satisfacción de poder salvar una vida.

Erin y Patrick se conocieron después de que ella se mudó a Fairhaven, Minnesota, en 2011 y comenzó a enseñar en la escuela primaria Kimball.

La amistad y la solidaridad tiene muchas formas y algunas personas van más allá de lo que haría la mayoría haría por salvar una vida y esta gran maestra es una de ellas.

 

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