Respetando la vida silvestre y preocupados por su preservación, el municipio tomo la medida.
La ciudad portuaria de Dunedin en Nueva Zelanda cierra regularmente las carreteras durante los meses de verano para permitir el paso seguro a la vida silvestre. Estos cierres generalmente no duran más de uno o dos días a la vez. Sin embargo, este año, el ayuntamiento decidió cerrar una transitada carretera durante todo un mes para que el león marino anidara de forma segura con sus crías.
"Un león marino de Nueva Zelanda y su cría se han instalado en el campo de golf de al lado y cruzan regularmente la calle para llegar a la playa", dijo el consejo. "Aún puede visitar el área a pie o en bicicleta, pero por favor deles a los leones marinos mucho espacio (al menos 20 m). Los leones marinos de Nueva Zelanda están en peligro de extinción y son una de las especies de leones marinos más raras del mundo".
El cierre de un mes ha sido bien recibido por los lugareños, muchos de los cuales instaron al consejo a hacerlo permanente para proteger la vida silvestre vulnerable, como los leones marinos. Los animales han sido durante mucho tiempo residentes especiales de la ciudad de Dunedin. Según informó The Guardian, los cachorros que habían nacido en la ciudad regresan más tarde para tener sus propios hijos allí, y se les ha encontrado dando a luz en potreros, cobertizos de granjas y al lado de las autopistas.
Quedan unos 12.000 leones marinos en Nueva Zelanda y su principal población reproductora sigue en declive, enfrentando las amenazas de la pesca, las enfermedades, la disponibilidad de alimentos y el impacto humano.
Una sociedad que respeta y protege la vida silvestre evoluciona en favor de los valores que los harán mejores seres humanos.
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