Mientras el huracán poderoso Delta se precipitaba hacia América del Norte, todos los que se encontraban en su camino se preparaban para lo peor.
Mientras que otros cerraban sus ventanas con tablas y corrían a las tiendas de abarrotes para comprar suministros, Ricardo Pimentel Cordero de Chinopimentel, México tenía otra prioridad.
Ricardo dirige el Refugio Tierra de Animales en Puerto Morelos, Quintana Roo, por lo que su única preocupación era proteger a los miles de animales sin hogar o desamparados que deambulan por su área. Pasó la “calma antes de la tormenta” comprando cientos de kilos de granos, semillas y otros alimentos para mascotas. Luego llevó a todos los animales del refugio a su casa, incluidos algunos animales sin hogar que encontró en el camino.
Tierra de Animales
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¡En total, Ricardo albergó a 300 animales durante la tormenta! Entre ellos había perros, gatos, gallinas, conejos, caballos, ovejas, cabras e incluso un erizo. Al darse cuenta de que había asumido un desafío enorme, Ricardo se acercó a sus páginas en las redes sociales para pedir donaciones.
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No estaba particularmente preocupado por cuidar a las mascotas durante la tormenta, pero le preocupaba que el verdadero trabajo fuera limpiar el desorden en el refugio después.
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“Si viviera solo, o solo con unos 10 o 20 perros, no me preocuparía demasiado, pero aquí hay cientos de animales y no podemos permitirnos el lujo de no tener suficiente comida almacenada, así que les pido encarecidamente que nos apoyen si puedes”, escribió en Facebook.
¡Todos los animales que Ricardo protegió durante la tormenta sobrevivieron con gran éxito! a pesar de que no podría haber sido cómodo o fácil cuidar de todos esos animales, este Noe contemporáneo no soñaría siquiera con dejar a ninguno de ellos desamparado.
Tierra de Animales
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Cuando la tormenta pasó, Ricardo comenzó a evaluar los daños. Su casa sobrevivió la tormenta relativamente ilesa, pero el refugio sufrió daños importantes. Varios techos se habían desprendido de los edificios, los árboles estaban derribados y el área de juego de los animales estaba llena de escombros. Una vez más, Ricardo pidió ayuda a sus amigos de Facebook. ¡Ellos se hicieron presente!
La gente solidaria se presentó para ayudar a reconstruir el refugio, y personas de todas partes hicieron donaciones para asegurarse de que los animales que Ricardo salvó serían alimentados.
Tierra de Animales
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La historia de Ricardo es un hermoso recordatorio de que es nuestra responsabilidad ayudar a los menos afortunados que nosotros, incluso a los animales que viven en nuestra comunidad. También nos demuestra lo importante que es la solidaridad de la comunidad.
Comparte esta historia de Ricardo por salvar a estos animales de la tormenta.
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